Rebo Tenía Razón y el frío marcó el “paseíto” que nos dimos el domingo tras la convocatoria para salir entre Arganda, Pozuelo del Rey y Campo Real. A las nueve y media nos reuníamos en el aparcamiento del “Poli” de Arganda, Rebo, Carlos, Vitorio, Javi M40 y yo.

Por fin volvía al pelotón Javi M40, tras 6 meses de recuperación después de su caída en bici en verano. Fue todo un placer volver a montar a su lado.

Saludos, ¡hola qué tal!, montamos las bicis que vienen en los coches, y comenzamos a rodar desde el Poli subiendo por la carretera que bordea Arganda y nos lleva a la rotonda, desde la que sale la Carretera a Valdilecha.

Esta subida, de 2 kilómetros aproximadamente, nos sirve para comenzar a olvidarnos de los -3 grados que teníamos a esas horas y comenzamos a dejar de pasar frío. Y además de dejar de pasar frío, dejamos el asfalto para comenzar por un camino que asciende al “Campillo” paralelo a la carretera de Valdilecha. También de subida suave que en el último tramo al Campillo se empina y nos obliga a meter el plato pequeño (alguno subió este tramo andando).

Tomamos un tramo sobre la carretera de Valdilecha y cogemos el camino que sale a la izquierda tras pasar por encima de la R3. Y desde aquí hasta Pozuelo del Rey, no conseguiríamos quitarnos de un viento helado que nos frenó constantemente durante 15 kilómetros. El frío era tan intenso que tanto los charcos de agua como el barro que vimos por el camino estaban congelados. Pero ahí estábamos con ganas para luchar contra ese viento que venía de frente. Y sobre todo el “nuevo” Biciocio Javi M40 que siempre estaba delante tirando. Un “máquina”.

Una vez en Pozuelo del Rey practicamos el OCIO que últimamente nos había faltado: unos montaditos de lomo, tomate y queso con refresco nos entonan para volver a pedalear ahora con el viento de espaldas.

En un periquete nos presentamos de vuelta en Campo Real para luego seguir hacia Arganda. Y nada más salir de Campo Real, al comenzar el “arroyo seco” se despista Carlos siguiendo por un camino equivocado. Quizás porque me puse delante indicando el camino, sin apreciar que Carlos se estaba quedando atrás y en un cambio de camino no nos vió (perdona Carlos. No volverá a suceder). El caso es que tras un rato y varios kilómetros buscando por dónde podría estar, apareció de nuevo. Vitorio (que también estaba con fuerzas a pesar del tiempo que llevaba sin montar) y Javi M40 bajaron por la trialera del arroyo seco, mientras Rebo y yo habíamos bajado por otros caminos buscando a Carlos. Creo que todos disfrutamos de la bajada desde Campo Real.

Y nada más que contar. Un poco más tarde ya estábamos todos de vuelta a la una y media junto a los coches para tomar el camino de vuelta a casa. Habíamos pedaleado unos 40 kilómetros tras pasar una mañana muy agradable en la que lo mejor, para mí, fue volver a ver a Javi M40 con nosotros. Bienvenido. Nos vemos en otra.

Esta entrada fue escrita el miércoles, 26 de enero de 2011 a las 20:40 y archivada en Salidas mountainbike. Puedes seguir cualquier respuesta a esta entrada a través del feed RSS 2.0. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu propio sitio web.