Hoy, martes día 10 de febrero y pese a la ausencia masiva de biciocios, la clase de spinning estaba a rebosar. A pesar de la ampliación de la sala no ha sido posible que pudiera realizar mi entrenamiento semanal. He tenido que subir a casa y entrenar solo. No pasa nada, únicamente que he echado de menos a los compañeros y, cómo no, a Esther, mi monitora. He intentado darme caña pero no es lo mismo, ¡y eso que he sudado lo mío!, je, je
Esther, aprovecho la ocasión para “presentarte” mi bicicleta de spinning ¿Para el próximo jueves habrá sitio? Estoy pensando en instalar una webcam en la clase para evitarme el viaje,
jajajaja
Buen rollito, ¿eh? Salud, biciocios.